No existen diferencias económicas entre el proceso de separación y el de divorcio.

Las medidas económicas a establecer tanto respecto de los cónyuges como en relación a los derechos y obligaciones patrimoniales y las paternofiliales respecto de los hijos comunes son iguales tanto en el proceso de separación como el de divorcio.

En lo que se refiere a los costes económicos del proceso, respecto de los costes del abogado y el procurador, el precio de un divorcio o separación no tiene diferencia, pues a pesar de que los efectos de una u otra declaración es diferente, el trabajo a realizar es el mismo y por tanto el precio también lo es en la inmensa mayoría de despachos profesionales.

Los costes de una separación y un divorcio no son diferentes. Tanto el precio como las consecuencias económicas son las mismas pues el régimen económico matrimonial se disolverá en ambos casos, dependiendo ya de las estipulaciones que se acuerden en el convenio regulador o se establezca en la sentencia, que serán las que determinen la regulación aplicable.